Café

Sola en la tienda, esperando que mi jefe vuelva de repartir un pedido, y me traiga café...

Debería estar repasando unas facturas, pero no puedo... mejor dicho, no quiero, no tengo ganas.

Tengo la mente demasiado ocupada, pensando en quién soy, quién no soy, de dónde vengo, a dónde voy y tontadas varias.

Estoy aburrida de mí. Intento parar, pero no lo consigo.

Será como lo de las facturas, que en el fondo no quiero.

Si al final todo va a ser porque soy una vaga... y me resulta mucho más cómodo mantener esta inercia, que comenzar una nueva...